El suelo de mi callejuela
está cubierto de cadáveres
que a lo largo de mi loca vida
fui abandonando entre puñales.
Siempre creí en mi buen comportamiento
sin sospechar, el mal que estaba haciendo
el desconocimiento del delito no exime
de culpa a este estúpido infame.
Jamás hice daño a una persona , per sé
ni creí molestar a nadie por mi forma de pensar
viví una vida, que muy pocos conocen
aunque digan que conocían todo mi penar.
Siempre ayudé a todo mi círculo íntimo
sabiendo en mis adentros, que caminaba con puñales
pero necesitaba. imperiosamente sentirme querido
fuese como fuese, y amainar mis fuertes instintos cobardes.
Ahora que el camino se difumina
hago recuento de mis locas fechorías
pero el perdón es demasiado grande para una urna
además no habrá nadie que recoja mis cenizas .
La soledad es la única amiga del bobo errante
sabedora de sus desgracias y lágrimas
cómplice de sinceridades y muertes
amante en noches de lunas llenas.
AMA
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Bienvenido todo comentario