No
hay religión sin mártires
Ni
dioses sin manchar de sangre
La
religión ya no es el opio del pueblo
Ahora
le dan otro nombre, lo llaman futbol.
Son
los mismos perros, con distintos collares
Prostituyeron
el lenguaje humano
Para
que dejaran de tener sentido
Y
en nombre de su puta libertad
Seguir
haciendo mayores tropelías.
Son
los mismos perros, con distintos collares
Nos
han convertido en dos números
El
uno y el cero, para poder controlar
Nuestros
pensamientos emergentes
Para
cambiar y que todo continúe igual.
Son
los mismos perros, con distintos collares
De
animales gregarios
Nos
han vuelto lobos solitarios
Porque
es mucho más fácil dominar
Una
muchedumbre ignorante, que un pensante.
Son
los mismos perros, con distintos collares
¿Hacia
dónde nos llevan?
Creo
que ni ellos mismos lo saben
Porque
continuamos sin salir de la cueva
Siendo
cada vez más vulnerables y manejables.
Son
los mismos perros, con distintos collares
AMA
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